Esa parece ser la consigna que nuestros super responsables (aun estan limpiando la basura de ritoque) dirigentes estudiantiles concientes pretenden instaurar, por un año más en la U. Para ser consecuentes con la tradición de los últimos años, los tontitos de la federación, apoyados por otro grupo de niñatos flojitos y malos pal estudio (onofre, unos que se han pitiado en el tribunal de mérito?*) de ciertas carreras igual de charchas y anodinas, quieren privarnos de nuestro derecho a estudiar libremente. Y en este caso lo hacen por la peor de las causas.
En esta pasada la revuelta se arma por el polémico artículo de la ley que permitirá a Licenciados de otras carreras, distintas de pedagogía, impartir enseñanza en el nivel secundario. Y aquí está el primer problema. Los tontitos de la federación nos invitan a hacernos cómplices de una demanda gremial defendida por el nefasto colegio de profesores. Ya de antemano cualquier asociación gremial que aparece con permanentes defensas corporativas, tratando de negar lo inexcusable, es una organización rancia y con tufo a mafia. El colegio de profesores no es la excepción. De la noche a la mañana aparecen campañas públicas para defender la brillante gestión de estos paladines de la educación y leemos de boca de notables personajes públicos testimonios muy sentidos y profundos que nos muestran como ciertos profesores (del pasado) marcaron la vida de algunas personalidades respetables del hoy. Otro pequeño gran detalle. Todos esos profesores hoy "homenajeados" eran probablemente normalistas. Gente que no pasó por las Escuelas de Pedagogía y que, sin embargo, enseñaba con mejores resultados, empeños, herramientas y voluntades que los profesores que hoy egresan de las universidades.
Todo tiempo pasado fue mejor, dicen.
¿Hoy qué tenemos en educación? Unos (futuros) profesores con bajísimos resultados al momento de rendir exámenes de evaluación docente e incluso en los exámenes voluntarios que se les aplicaron a los estudiantes de último año de pedagogía (Programa Inicia) en diciembre de 2008. Así las cosas, parece que la alianza entre tontitos + chantas (federación + colegio de profesores) huele a podrido. No a azufre, pero sí muy mal.
Muy mal porque, es estúpido pretender que las propias víctimas de la mediocridad de los asociados al mentado colegio, sean los mismos que salen a prestarles ropa, en horas en que por fin se transparenta una situación que se viene produciendo, de hecho, desde hace años.
Quienes sostienen que un licenciado especialista en una determinada materia no puede enseñar, es simplemente alguien que repite ideas gremiales y defensas corporativas. ¿Acaso creen que los profesores que enseñan en la universidad son pedagogos?. ¿Alguién reclama porque su profesor de derecho, o en la escuela de ingeniería comercial o en industrial no es un profesor salido de la escuela de pedagogía? OBVIO QUE NO.
Si tenemos a licenciados, de calidad en la mayoría de los casos, enseñando en las Universidades, (al menos en las tradicionales) en las que las exigencias son de nivel, precisamente, SUPERIOR, ¿por qué licenciados, con exigencias de la misma calidad, no podrían enseñar en liceos, en un nivel de educación que no es tan elevado intelectualmente ( en el caso que se discute, se trata del nivel secundario)?
Lógicamente, ese análisis no lo hacen los tontitos, ni menos los chantas. Porque los primeros sólo quieren llevar agua su molino y sacar provechos políticos, y los segundos quieren perpetuar su mediocridad, ocultándola detrás de una pseudo apelación a la conciencia social, la que nos obliga a ser cómplices del peor abuso que podemos soportar: legitimar a una camarilla que pretende ser la dueña de la verdad y de los destinos de la educación en Chile, en circunstancias que esos son los mismos que han sido siempre más parte del problema que de la solución.
N. de la R.
Tontitos: Miembros de la Fepucv
Chantas: Colegio de profesores
*Las malas lenguas cuentan que la mesa ejecutiva de la fepucv se estaría viendo dismuída por la eliminación de uno de sus integrantes, debido a su pésimo desempeño académico... eso sería. Adios.
En esta pasada la revuelta se arma por el polémico artículo de la ley que permitirá a Licenciados de otras carreras, distintas de pedagogía, impartir enseñanza en el nivel secundario. Y aquí está el primer problema. Los tontitos de la federación nos invitan a hacernos cómplices de una demanda gremial defendida por el nefasto colegio de profesores. Ya de antemano cualquier asociación gremial que aparece con permanentes defensas corporativas, tratando de negar lo inexcusable, es una organización rancia y con tufo a mafia. El colegio de profesores no es la excepción. De la noche a la mañana aparecen campañas públicas para defender la brillante gestión de estos paladines de la educación y leemos de boca de notables personajes públicos testimonios muy sentidos y profundos que nos muestran como ciertos profesores (del pasado) marcaron la vida de algunas personalidades respetables del hoy. Otro pequeño gran detalle. Todos esos profesores hoy "homenajeados" eran probablemente normalistas. Gente que no pasó por las Escuelas de Pedagogía y que, sin embargo, enseñaba con mejores resultados, empeños, herramientas y voluntades que los profesores que hoy egresan de las universidades.
Todo tiempo pasado fue mejor, dicen.
¿Hoy qué tenemos en educación? Unos (futuros) profesores con bajísimos resultados al momento de rendir exámenes de evaluación docente e incluso en los exámenes voluntarios que se les aplicaron a los estudiantes de último año de pedagogía (Programa Inicia) en diciembre de 2008. Así las cosas, parece que la alianza entre tontitos + chantas (federación + colegio de profesores) huele a podrido. No a azufre, pero sí muy mal.
Muy mal porque, es estúpido pretender que las propias víctimas de la mediocridad de los asociados al mentado colegio, sean los mismos que salen a prestarles ropa, en horas en que por fin se transparenta una situación que se viene produciendo, de hecho, desde hace años.
Quienes sostienen que un licenciado especialista en una determinada materia no puede enseñar, es simplemente alguien que repite ideas gremiales y defensas corporativas. ¿Acaso creen que los profesores que enseñan en la universidad son pedagogos?. ¿Alguién reclama porque su profesor de derecho, o en la escuela de ingeniería comercial o en industrial no es un profesor salido de la escuela de pedagogía? OBVIO QUE NO.
Si tenemos a licenciados, de calidad en la mayoría de los casos, enseñando en las Universidades, (al menos en las tradicionales) en las que las exigencias son de nivel, precisamente, SUPERIOR, ¿por qué licenciados, con exigencias de la misma calidad, no podrían enseñar en liceos, en un nivel de educación que no es tan elevado intelectualmente ( en el caso que se discute, se trata del nivel secundario)?
Lógicamente, ese análisis no lo hacen los tontitos, ni menos los chantas. Porque los primeros sólo quieren llevar agua su molino y sacar provechos políticos, y los segundos quieren perpetuar su mediocridad, ocultándola detrás de una pseudo apelación a la conciencia social, la que nos obliga a ser cómplices del peor abuso que podemos soportar: legitimar a una camarilla que pretende ser la dueña de la verdad y de los destinos de la educación en Chile, en circunstancias que esos son los mismos que han sido siempre más parte del problema que de la solución.
N. de la R.
Tontitos: Miembros de la Fepucv
Chantas: Colegio de profesores
*Las malas lenguas cuentan que la mesa ejecutiva de la fepucv se estaría viendo dismuída por la eliminación de uno de sus integrantes, debido a su pésimo desempeño académico... eso sería. Adios.